Derribando mitos sobre adopciones en Almirante Brown
Universidad Nacional Guillermo Brown
“Adoptar es darle una familia a un niño, nunca un niño a una familia” fue una de las conclusiones del encuentro organizado en forma conjunta por la UNaB, el Municipio de Almirante Brown y la fundación Causa Común destinado a dilucidar mitos y dudas acerca del proceso de adopción: en qué consiste, qué dice la legislación y qué criterios deben guiar a las instituciones públicas a cargo para ayudar a las familias que desean adoptar
La adopción es un tema sobre el que abundan los mitos y las dudas, de un lado y del otro: ¿Cuánto tiempo espera un chico una familia? ¿Es necesario estar casados para poder adoptar? ¿Y si mis ingresos no son tan altos? ¿Y si no tengo casa propia? son algunas de las preguntas que suelen aflorar antes de encarar este proceso tan sensible.
Para comenzar a responderlas, la Universidad Nacional Guillermo Brown (UNaB) en articulación con la Municipalidad de Almirante Brown y la asociación civil Causa Común organizaron la charla abierta Hablemos de adopción: El derecho de los niños y las niñas a tener una familia que tuvo lugar el lunes 19 de agosto, en la Casa de la ultura de Adrogué donde más de 200 personas colmaron el lugar para participar de este evento sobre un tema tan sensible.
“La gente necesita saber que adoptar no es imposible, y si quienes conocen esto se lo cuenta al resto, podemos dar vuelta esta historia”, sostuvo la especialista Belén Logüercio, quien es titular del Juzgado de Familia 2 de los tribunales de Lomas de Zamora.
Por su parte, la directora del Hogar de niños, Niñas y Adolescentes El Alba de Longchamps, Karina Citadino, precisó los detalles del sistema de adopción vigente en la Argentina y en la Provincia de Buenos Aires y puso de relieve que la legislación establece un período de 180 en el que la prioridad de las instituciones públicas cuando un niño, niña o adolescente queda en desamparo es promover la reintegración del chico en su familia de origen.
“Ahí se prioriza el interés de los chicos y su derecho a tener una familia, no el interés de los adultos o su deseo de tener un hijo, subrayó Logüercio quien agregó: “Tenemos que buscarle una familia al niño, nunca un niño a una familia”.
El proceso y sus prioridades
Una vez pasados esos 180 días, el Estado puede dictar el cese de la responsabilidad parental de los progenitores e iniciar la búsqueda de una familia, a través de los inscriptos en el Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines de Adopción (RUAGA).
Para inscribirse en el RUAGA, “no hace falta estar en pareja, ni estar casados, ni ser heterosexuales, ni tener mucho dinero”, destacó la abogada Claudia Portillo,
Como la responsabilidad de restituir el derecho del niño a una familia es el Estado, los postulantes pasan por un proceso de evaluación: “Si no resultaran elegidos, eso significa que quedan algunos aspectos por trabajar, no que hayan quedado afuera”, señaló la abogada.
Una vez que se encuentra a la familia adoptante más adecuada para el o los niños –porque también se procura, entre otras cuestiones, no separar a los hermanos–, se inicia el proceso de vinculación, que debe ser muy cuidadoso tal como sostuvo Logüercio: “Es una gran responsabilidad trabajar la vinculación, los chicos nunca vienen a satisfacer las expectativas de los adultos, y los postulantes deben dejarse ayudar porque hay que evitar que los chicos, que ya han sufrido ese fracaso en el vínculo familiar, sientan un fracaso más”
“Una familia para siempre”
En cuanto a las edades de las familias que buscan adoptar, Portillo explicó que “la mínima requerida es de 25 años, y no hay límite superior, aunque se busca que no haya una diferencia de más de 50 años con la edad del niño, y una diferencia mínima de 15 años”. Además, recalcaron que la familia debe tener como mínimo cinco años de residencia en Argentina.
“La finalidad de la búsqueda –sintetizó Portillo– es que las personas puedan brindarles una parentalidad saludable, amorosa y duradera, que sea para siempre”.
El encuentro contó con la participación del intendente de Almirante Brown, Mariano Cascallares, quien concurrió con parte de su gabinete, y del presidente del Concejo Deliberante local, Nicolás Jawtuschenko.
Además, participaron del evento integrantes del programa municipal Brown Protege, que integra la acción de los organismos públicos locales que atienden a niños, niñas y adolescentes: “Brown Protege tiene el objetivo de coordinar múltiples actividades que llevan adelante las áreas de Desarrollo Social, de Educación, de Cultura y de Deporte, y de darles a nuestras niñeces y adolescencias no sólo un paraguas, sino también un abrazo”, indicó el titular del legislativo local.